1º de Mayo: “Día Internacional de los trabajadores” 
							(Ley 21.329) 
							
							
							El 1ro de Mayo se conmemora el “Día Internacional 
							del Trabajo”, la fecha remite a las luchas de los 
							trabajadores norteamericanos de fines del siglo XIX.
							
							
							Ese día, en 1886, los trabajadores de la ciudad de 
							Chicago solicitaron a las autoridades el respeto de 
							la jornada laboral de ocho horas y amenazaron con la 
							huelga si no se cumplía. La negativa de las 
							autoridades a cumplir con los Derechos de los 
							trabajadores desató una serie de revueltas y huelgas 
							que fueron brutalmente reprimidas, hasta que se 
							apresó y ejecutó a cuatro líderes anarquistas, los 
							“mártires de Chicago”. La comunidad obrera 
							internacional repudió estos hechos y en la Segunda 
							Internacional de Trabajadores, realizada en París en 
							1889, se decidió conmemorar/celebrar el Día del 
							Trabajador todos los años.
							
							
							A partir de 1890, la mayoría de las comunidades de 
							trabajadores organizadas de los países de América y 
							Europa se sumaron fuertemente tanto a los festejos 
							como a las movilizaciones y reclamos que cada 1ro de 
							Mayo convocaban a mayor cantidad de gente.
							
							
							En nuestro país, la actividad de los anarquistas y 
							los socialistas durante las últimas décadas del 
							siglo XIX y las primeras del XX fue muy intensa en 
							materia de lucha por los derechos del trabajador. 
							Estos reclamos eran el derecho al descanso 
							dominical, la igualdad de retribuciones para hombres 
							y mujeres, el fin de la inmigración subsidiada, la 
							prohibición del trabajo infantil y la jornada de 
							ocho horas, entre otros. Algunos de estos derechos 
							fueron sancionados por el presidente Hipólito 
							Yrigoyen, pero la crisis del ‘30 llevó a la pérdida 
							de derechos adquiridos, complicando la situación de 
							los trabajadores.
							
							
							Durante los años ‘30 y principios de los ‘40, la 
							Confederación Argentina de los Trabajadores (CGT), 
							creada tras la crisis, no tenía todavía fuerzas 
							suficientes para canalizar los reclamos de las 
							mayorías, por ende, los gremios más fuertes, por 
							ejemplo, de ferroviarios, de metalúrgicos y de 
							empleados de comercio, solían negociar sus derechos 
							en forma independiente.
							
							
							El gran cambio en la política laboral argentina vino 
							de la mano de la acción de gobierno de Juan Domingo 
							Perón, primero desde la Subsecretaría de Trabajo y 
							Previsión Social, a partir del año 43 y, luego, 
							desde su rol de Mandatario. Los festejos del 1ro de 
							Mayo de 1946 son recordados como muy importantes y 
							singulares ya que fue la primera vez en el país que 
							la movilización fue encabezada por el mismo 
							presidente.